Resumen
Ba’cuana fue un santuario de suma importancia en el paisaje simbólico que crearon los zapotecas en el Posclásico en la parte sur del Istmo de Tehuantepec, donde destacaban sus expresiones rupestres. En este trabajo se estudian las expresiones que se pintaron después de la lle gada de los españoles. Combinando estudios de estilo, iconográficos y de análisis de pigmentos se logra una separación en dos etapas principales durante la colonia, con características diversas, que dan cuenta de la evolución de este sitio en estos tres siglos. Ba’cuana siguió siendo un santuario muy venerado, centro de un nuevo paisaje sagrado, en el que quedó plasmada la agencia de las poblaciones zapotecas, que desarrollaron sus propios discursos visuales, los cuales eran reflejo de la creación de una nueva cultura fruto de la reapropiación de elementos artísticos y religiosos cristianos, de la ortodoxia y del lado diabólico.